Un que hacer diario. Última reflexión.

KUKUDREAMS

Érase una vez una jovencita de 24 años llamada Tamara. Cuando llegó a la Universidad de Leioa, (a cursar segundo de Magisterio Infantil),un año más tarde que el resto de sus compañeros, entro a la clase de Tics y allí comenzó la increíble historia que os voy a contar, la esperaba la maestra Alaitz con un montón de ganas y conocimientos que compartir con la clase utilizando como herramienta el trabajo diario combinado con una dosis de diversión.

La profesora les propuso a los 26 jovenzuelos que cada uno creara un blog, que trate de temas relacionados con la infancia y centro escolar. En él podían incluir artículos que encontraran por la red o incluso trabajos que tengan los propios alumnos realizados por ellos mismos y que les apetezca compartirlos y por si fuera poco, tenían que incluir una reflexión de la tarea desempeñada de día a día en clase. En ese preciso momento se sembró el pánico en la clase.

¡Un blog! ¡Cómo vamos a crear un blog! –gritaba unos.

¡Pero si no sabemos cómo se hace!- se desolaban otros.

¿Cómo vamos hacer tantísimas cosas?- se les oía a los de más allá.

Alaitz al escuchar tales palabras les calmó y les fue explicando paso a paso como tenían que ir creándolo.

Primero tenéis que crearos una cuenta gmail todo aquellos que no tengáis. – Les dijo la profesora con voz tranquilizadora.

Una vez que todos los alumnos tenían la cuenta gmail creada, la profesora les dio el siguiente paso.

¡Ahora  a través del gmail cliqueáis donde veis el nombre de Blogger!  ¡Una vez allí solo tenéis que inventar un nombre y comenzar a crear el diseño! - procesaban los alumnos con el rostro serio ante el temor que el Blog les causaba.

Todos los alumnos se pusieron manos a la obra y comenzaron a indagar en el diseño. En el rostro de algunos de los alumnos se delataba miedo, pánico,ansiedad… en cambio, en otros alegría,entusiasmo… ya habían realizado en alguna otra ocasión un blog y dominaban perfectamente la herramienta. Pero sin duda alguna, la que más destacaba era Tamara. En ella se reflejaba la cara de tristeza e incertidumbre ...dada la dificultad que conllevaba el mero echo de conseguir un simple nombre que le haría depejar y le diera identidad a su blog.
 

 ¿Qué hacer?- Se preguntaba con las manos sobre la cabeza.

Minutos más tardes se le ocurrió un brillante nombre que jamás había escuchado y además, no lo había elegido nadie. Su nombre era KUKUDREAMS!

 Se puso tan contenta que en un abrir y cerrar de ojos tenía prácticamente todo el diseño de su blog terminado.

Como cada martes Tamara iba a clase  de tics como el resto de sus compañeros, con ganas de querer aprender y decorar su blog.

¿Qué aprenderemos hoy?- se preguntaba Tamara, curiosa.

¡Seguro que más programas! -respondían algunos de sus compañeros.

 Y así fue, Slide Share, ISSUU, Google SITE.

Cada  semana de clase aprendían una nueva herramienta para utilizar en el Blog.

Pasaron los días y los alumnos iban haciendo uso de todos los programas que la profesora les iba mencionando. Había aprendido tantos y tantos que Tamara casi no se acordaba casi ni de como se llamaban. Delicious, Wikispaces, Picture trail, Scoop-it, Glogster, Mindsmeister, Maymister, Pixlr…… ¿ Me olvidare alguno? - Pensaba la joven para sus adentros.

Con el paso de los meses llego diciembre y todos los alumnos estaban orgullosos de grandísimo  progreso que estaban dando cada uno con su blog y en las tareas grupales.

Entre ellos se ayudaban si lo necesitaban, indagaban en tutoriales de la red para poder utilizar más programas, pedían consejos a la profesora, buscaban información  sobre artículos de internet…

Pero Tamara  cuando se quiso cuenta,  se había terminado el cuatrimestre y tenía que presentar blog. No estaba triste ni mucho menos, se  fue orgullosísima hacia su casa, ya que sabía el gran esfuerzo que había invertido a lo largo de los meses en la creación de su blog y todo lo que había aprendido, no solo para aprobar dicha asignatura sino como para su futuro como docente.

Y así terminó el cuento, todos felices y contentos.